por Roberto Ayala La clase política lidia con constantes preguntas acerca del humor social y como aquellas tendencias ¨novedosas¨ irrumpen en el ambiente político. Porque estas ¨novedosas¨ viejas tendencias, amenazan con desestabilizar cierta armonía de esos mecanismos políticos. En criollo, personajes que se presentan como nuevos y con discursos disruptivos, basados en el ¨sentido común¨ - algo que empatiza enseguida con cualquiera de los mortales - se vuelven populares; un poco construidos por los medios importantes, financiados por importantes empresarios y otro poco por las consultoras políticas, que los bañan, los peinan y los presentan como figuras fuertes ante la sociedad. Poco o con cierta blandez, se interroga la clase política acerca de sus deudas; insisto y para situarlo -   aunque no es el único actor – encarnado en el oficialismo, porque más fácil es trabajar de opositor. Aunque no esté   firme un bipartidismo claro, es decir, los terceros ¨disconformes´ siempre aparece

 por Roberto Ayala En las primeras materias de la carrera de ciencia política, se estudia que uno de los atributos del Estado es el monopolio legítimo de la fuerza; es decir, aquella capacidad del Estado sobre determinado territorio, para mantener el orden y constituirse así mismo, le es necesario el ejercicio de la fuerza por medio de las herramientas que tiene: el poder de policía, etc. Este ejercicio del monopolio legítimo de la fuerza cuando la integridad estatal está en riesgo, quizá ayude a entender mejor el concepto. Porque el ejercicio de la violencia como método represivo de opositores u posiciones populares que se construyen alrededor del descontento, no resulta tan legítimo. Y los tratados internacionales, la reforma de la constitución nacional, le ponen un marco de ejercicio al monopolio legítimo de la violencia. Dicho esto, cuando la corte suprema de inmiscuye en asuntos provinciales, tocando la autonomía de las provincias y también alterando el federalismo, aduciend

por Roberto Ayala El jefe de gabinete del gobierno, dijo - ¨Pero ¿quién es el candidato? ¿El amigo invisible?¨. Es cierto que – en la lógica electoral de la política - en cada elección debería expresarse entre otras cosas, una vocación por el ejercicio del poder, que no es lo mismo que ¨conducir¨ y eso quedo sobradamente demostrado con el mismo frente. Pero a decir verdad, es esta elección, la que nos da - tanto en términos electorales, como en términos políticos -  mucho por analizar, más allá de la constante coyuntural si Cristina si o Cristina no, de la que ya hemos analizado bastante. Emerge de este tiempo, la cuestión de los ¨planes, programas y proyectos¨ lo que quizá nos sirva como ejercicio colectivo, poder detenernos a analizar cómo se expresarían en cada uno de los frentes o en cada uno de los candidatos, estos planes, programas y proyectos cuando ya la mayoría de los nombres estén puestos. Ahora sería apurarnos sobre lo que hasta ahora, es un interrogante en el oficial

 Por Roberto Ayala  Tras el viaje económico a China que augura alivio para las arcas nacionales, pero que exhibe otras discusiones económicas: ¿endeudarse en otra moneda? (algo que evita Brasil postergando el proyecto de moneda única), ¿obligaciones económicas con un país industrializado?, ¿es China el mundo que viene? Probablemente, ante el estado de situación sensible de reservas, todas estas preguntas y otras tantas, tendrían respuesta afirmativa. Ante un gobierno con pocos grandes anuncios, el ministro de economía oficia casi de un jefe de Estado, llevando en el viaje al líder de la Campora y presidente del pj bonaerense, lo que adhiere a todo esto, más suspicacia de lo que será el cierre de fórmulas camino al 24 de junio, que como ya dijimos; el oficialismo, pero centralmente - del triunviro de la coalición – el kirchnerismo, evaluará hasta último momento las posibilidades, tanto del gobernador de la provincia de Buenos Aires, como la del ministro del interior y todas las combinac